Puede que de tanto mirarte, te sientas inquieto, acosado, y es por eso que hoy te explico el porqué de mi manía, mi voluntad se vuelve frágil cada que estás cerca, porque cada que intento no hacerlo sucumbo ante tu encanto.
Mirarte,
es intentar entenderte,
es perder el miedo a lo que está por llegar,
es prolongar nuestra confianza,
es agradecer por ese instante en el que estás cerca,
es sonreír por tus estupideces,
es hablarte de la forma más sincera,
es sentir el fuego con el que observas,
es encontrar cosas que quizás ni notas,
es deleitarme con tus estúpidas pestañas,
es preguntarme ¿Por qué demonios estamos en estas?
sin pretenderlo, porque el destino así lo quiso.
Mirarte,
es saber que aun siendo un maracuyá viejo me gusta tu compañía,
me gusta hacerlo porque cada vez encuentro detalles que ni conocía,
y aunque sé que de los dos tú eres el artista,
intento tatuar tu figura en mi mente para así palparte de repente .
Me gusta mirarte porque guardas misterio,
porque al mirarte,
siento seguridad,
entiendo tu perversidad,
aprendo a reconocerte,
a comprender lo que el universo hizo de ti.
Porque al mirarte respiro con lujuria y me doy cuenta que deseo seguir siendo una pirómana.
JenHathor